cada cual camina a su propio ritmo por la vida @ Galicia, España
Todo lo que tenga que pasar tiene que pasar. Es lo que siempre pienso cuando estoy montándome en un avión, tren, barco, camello o elefante para llegar o recorrer por algún lugar en donde no conozco a nadie, ni tan siquiera el lugar mismo donde voy. Es esa voz interna la que escucho susurrándome al oído cuando siento miedo y me dice “calma”, y se transforma la experiencia en una inolvidable aventura. Nunca olvidándome de darle también gracias a la vida cuando ingiero cualquier alimento local del que no tengo idea que es pero sé que me caerá bien, convirtiéndose en una agradable experiencia gastronómica …
Viajar se ha convertido en mi adicción y honestamente me llegó este sentimiento en mi temprana madurez, cuando supe zafarme de todas las cosas que la sociedad quiere que tengas en la vida (como casarte, tener hijos, meterte en deudas de todo tipo, esperar la semana de vacaciones que has acumulado por un año en tu trabajo e irte de crucero o a un all inclusive, luego trabajar 30 años en el mismo trabajo hasta que te retires con una buena pensión y esperar la muerte) El que caiga en eso, pues tendrá que enfrentar las consecuencias que eso conlleva, así como yo también tendré que enfrentar las mías por solo querer viajar por el mundo.
Luego de pasar muchos años adicto al trabajo, a los zapatos caros y los lujos vacíos, si de algo me arrepiento en esta vida es de que ese tiempo no lo recuperaré jamas, aunque el dinero lo he generado de manera exponencial en mis negocios, el tiempo no y eso para mi es imperdonable. Lo único que he podido hacer con el tiempo es ganarlo o mas bien manejarlo yo mismo y no un ponchador. Escaparme una y otra vez de este entorno en el cual nací se ha convertido en una necesidad cada vez mas constante. Porque no quiero jamas arrepentirme de haber dejado de hacer algo que realmente me fascina, me mueve, me hace sentir vivo, le da sentido a mi vida y sobretodo me da felicidad. El lugar o destino que escoja, siempre sera mi felicidad.
Nunca sera mi intensión presumir de mis viajes cuando comparto mis fotos y vídeos por las distintas redes sociales. Aunque las mentes estrechas lo pudieran ver así, la realidad es que no lo es. Porque en la medida que vaya descubriendo cada ves mas este mundo, conozca culturas, historias, pueblos ancestrales y gastronomías, mas siento que no tengo que impresionar a nadie, que sigo siendo el mismo ser humano insignificante y común. Sin ningún aire de grandeza o vanagloria, ni mucho menos una celebridad, porque he optado por un estilo de vida mas tranquilo y autentico en el que es mejor pasar por desapercibido. Cuando publico cualquier cosa de mis viajes mi única intensión es motivar a otras personas a que ellos también, si lo desean, pueden hacer lo mismo que yo. Enseñarles que el mundo esta ahí esperando por ti y que poco a poco, a través de los años puedes descubrirlo sin apuros… aunque el planeta gire de prisa.
En cada viaje me transformo, jamas soy el mismo cuando obtengo una nueva experiencia de viajes a mi vida. Siempre me voy de una manera y regreso de otra. Cada día trato de descubrir mas, sentir mas y siempre estar abierto a nuevas posibilidades en todos los aspectos. Cada vez me importa menos que carro salio de ultimo modelo, o que marca de ropa o calzados llego nuevo a la tienda o simplemente si los gabinetes de mi cocina tienen polilla, o si ando muy sencillo vestido por un lujoso centro comercial. Ya no importa el poder adquisitivo que tengas o los largos títulos académicos que ostentes porque de nada te sirven si caes en el medio del amazonas y tienes que sobrevivir. La realidad es que el día que mueras solo te llevaras las experiencias que has disfrutado y nada mas.
La vida me ha ensenado mucho y aun continuo aprendiendo de ella porque estoy abierto a todas las experiencias que pueda tener, sin prisa, viviendo un día a la vez. Si de algo estoy seguro es que valemos mas por nuestras experiencias vividas que por los sueldos, lujos, títulos o estatus social que tengamos. Quien los quiera ostentar y si es feliz haciéndolo pues muy bien pero eso no lo es todo. Uno escoge la manera de como la sociedad te quiera identificar. Ya he determinado que lo único que quiero es vivir, aprender, crecer y ser mejor ser humano cada día, lo demás no existe. Mi estilo tampoco es estar en competencia con nadie por tratar de ser mejor o tener mas cosas, eso es mucha perdida de energía. Yo solo quiero conocer el mundo, así sea en un burro, lo que quiero es estar ahí y que nadie me cuente.
Esto es una lucha contra el tiempo, el reloj no se detiene por nada ni por nadie. Solo se que tengo que recorrer el mundo lo mas rápido que pueda durante mi estancia en la tierra, antes de que me vaya en el eterno viaje de donde nadie ha vuelto.
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“Y el tiempo pasó … y jamas se detuvo …” – Boni